Manuel Valero, expresidente de ALTODO: “El derecho a la huelga es constitucional y abarca a los abogados del Turno”
ALTODO Madrid homenajea este jueves en el ICAM a su cronista y uno de sus fundadores en un acto que reunirá a la abogacía del Turno madrileño

Manuel Valero referente del Turno de Oficio, ahora al frente del Club Senior del ICAM del que es decano Eugenio Ribón (Imagen cedida)
Manuel Valero, expresidente de ALTODO: “El derecho a la huelga es constitucional y abarca a los abogados del Turno”
ALTODO Madrid homenajea este jueves en el ICAM a su cronista y uno de sus fundadores en un acto que reunirá a la abogacía del Turno madrileño

Manuel Valero referente del Turno de Oficio, ahora al frente del Club Senior del ICAM del que es decano Eugenio Ribón (Imagen cedida)
Este jueves será un día grande para Manuel Valero. Para este madrileño defensor del Turno de Oficio desde hace más de cuarenta años, ha llegado el momento de presentar la obra “La odisea por la humildad y la justicia. Ayer y hoy en la historia de la Asociación de Letrados por Turno de Oficio Digno”, un libro que sirve para explicar la historia de ALTODO como asociación referente en el Turno, donde este abogado convertido en cronista recoge testimonios de unos 300 abogados asociados a esta entidad. Un evento que hará pequeño el ICAM de nuevo y al que han confirmado su presencia la mayor parte de socios de esta entidad.
Manuel atiende a este periodista que conoce desde hace más de veinte años, en vísperas de la celebración del Día de la Justicia Gratuita del próximo 12 de julio. Se celebra este jueves este evento. Nuestro interlocutor se licenció en 1971 en Oviedo, ejerciendo unos años en esta ciudad española como abogado laboralista con despacho propio, hasta que en 1980 regresó a Madrid para colegiarse en el ICAM. En ese momento se incorporó al Turno de Oficio. Este libro recoge parte de la historia de ALTODO y se ha asegurado que se encuentra en la Biblioteca Nacional para consulta de cualquier interesado en este tipo de asuntos.
Allí abrió su despacho personal que aún le acompaña en su Vallecas natal. Poco después, en junio de 2005, fundaron la asociación Santiago Luengo, Luis Mateos, Claudia Fernández y otro compañero que estuvo poco tiempo. “En mi caso, me incorporé en septiembre de ese año. Siempre una de mis vocaciones fue ejercer en el Turno de Oficio”.
Valero formó parte del Turno de Oficio desde que se colegió en el ICAM. “Antes de la ley que aprobó Felipe González en 1996, el Turno de Oficio era una obligación de todos los abogados. A lo largo de los años ha cambiado de forma sustancial, sobre todo por la lucha reivindicativa de ALTODO, entidad de la que fui presidente en 2009.

Valero ha estado en la pancarta en muchas ocasiones para defender el turno de Oficio (Imagen cedida)
En aquel momento, mi despacho en la calle de La Palma número 34 era la sede de la asociación. Con posterioridad, nos nombraron diputados de la Junta de Sonia Gumpert, lo que me hizo dimitir. La lucha de ALTODO fue también la de ALA y de APAEM. Luego el fenómeno asociativo se extendió por otras CCAA.
Este libro recoge un periodo histórico de la lucha de ALTODO por la dignificación del Turno de Oficio que va del 2005 al 2012. También sirve para conocer la justicia madrileña en aquella época, los decanos del ICAM que pasaron por Serrano 9 y la propia actividad del Ministerio de Justicia. Después de veinte años, la abogacía del Turno sigue luchando por mejorar su situación y condiciones laborales. Hemos avanzado mucho, pero queda camino por recorrer. Necesitamos una nueva ley y lograr mejoras en los baremos”, aclara.
Manuel ha seguido de cerca la presentación del Observatorio de la Justicia Gratuita que promueven el CGAE y Aranzadi La Ley. Ha leído las noticias que este medio ha publicado sobre la situación del Turno de Oficio. Su diagnóstico es claro, fruto de su experiencia como abogado adscrito a los Turnos de Penal, Civil y Audiencia Nacional: “Arrastramos en baremos una actualización sin lograr de más del 50 %. Las actualizaciones son escasas, lo que obliga a otra gran mejora y a que se paguen todas las actuaciones que hacemos”.
Desde su punto de vista, “no solo hay menos abogados de Oficio para atender más asuntos de Asistencia Jurídica Gratuita, sino que los abogados que nos dedicamos a ello nos hemos dado de baja en muchos servicios. Y más con la entrada en vigor de la Ley 1/2025, que incluye los MASC como requisito de procedibilidad y ha distorsionado todo el sistema de asistencia jurídica gratuita. La Comunidad de Madrid, como excepción, ha creado un baremo para las mediaciones y su cobro, pero esta práctica no es un escrito. Da más trabajo y retrasa la formalización de la encomienda que ha hecho el ICAM del procedimiento”.
Para Valero, “los abogados del Turno debemos cobrar todas nuestras actuaciones. Aún hay muchas pendientes de cobro al no estar contenidas en los baremos. En el tema de las ejecuciones de sentencia, que duran años, no está contemplado esto. Lo mejor sería incluir esas mejoras en la tramitación de la Ley de Asistencia Jurídica Gratuita de 1996. Por el momento, lo que cobramos es ridículo, casi simbólico, porque los gastos que hacemos en la gestión del servicio se comen la mitad de nuestros honorarios en cada baremo”.
¿Cómo solucionamos el problema?

Manuel Valero con Sonia Gumpert en una reunión del ICAM del que fue vicedecano (Imagen cedida)
Respecto a la solución del problema, el debate está abierto entre distintas posibilidades. “No me gusta que nuestra actividad se laboralizara o nos convirtiésemos en funcionarios. Estoy porque tengamos una Ley de Asistencia Jurídica Gratuita justa, digna y bien pagada. Debe adaptarse al momento actual que vivimos. Es una de las asignaturas pendientes de la profesión y que he recogido en el libro. Hay que parar la sangría de compañeros que dejan el Turno y poder remunerar dignamente este servicio, que seguirá creciendo porque crece la población vulnerable en nuestro país”.
En su opinión, “hay servicios como el que prestamos en la Audiencia Nacional, muy complejo, con procedimientos de miles de folios y acusados, pero muy mal pagados en estos momentos. El trabajo de abogado de Oficio en este tipo de destinos no es rentable. Es el momento de hacer la reforma que todos los profesionales que prestamos el servicio estamos buscando”.
Valero, que forma parte del Turno de Oficio desde los años ochenta, sigue inscrito en Civil, Penal y en la Audiencia Nacional. Aún recuerda uno de sus primeros casos, a la que su clienta la suele ver a menudo en su Vallecas natal. “Me tocó atender a esta señora, que la acusaban de hurto porque estaba cuidando de una señora mayor, al ser acusada de haberse quedado con las joyas de ésta. Me tocó defenderla y logramos absolverla. Con posterioridad, su hijo recuperó esas joyas que su madre tenía ocultas y no se acordaba dónde por el Alzheimer que padece. Ahora la veo casi todas las semanas y hablamos con asiduidad”.
Sobre la huelga general del Turno de Oficio que ha convocado el sindicato Venia para los próximos 11 y 12 de julio en toda España, Valero cree que “han demostrado que podemos ir a la huelga. Sin embargo, organizar una huelga general de todos los abogados del Turno es difícil de organizar. Nosotros fuimos la primera asociación que hizo una huelga de designaciones en Madrid en 2012. Fueron más de 3000 abogados que renunciaban a las designaciones e hizo que el servicio entrase en crisis. No había abogados para atender las designaciones en la etapa de Antonio Hernández-Gil como decano”.
A su juicio, “para que este tipo de huelga tuviera éxito, haría falta una organización que alcanzara todo el campo nacional. Y es que cada día está peor el servicio. Sorprende que desde el CGAE no se promueva dicha huelga. Ya hay más de veinte autos judiciales que, declarándose el abogado de Oficio en huelga, han suspendido el acto judicial. El derecho de huelga es constitucional y lo podemos ejercer todos los juristas”.
En ese acto en el que hoy estaremos presentes, será el decano del ICAM, Eugenio Ribón, quien acompañará al autor en este emotivo recorrido por veinte años de lucha y compromiso en defensa de un Turno de Oficio digno. El libro cuenta con el prólogo de Ribón y con el epílogo de otro abogado referente de ALTODO, como es el caso de Isidro Moreno. Con rigor histórico, sensibilidad y un valioso material gráfico, Manuel Valero nos acerca a la trayectoria de la asociación desde sus inicios más humildes hasta los hitos más destacados de los últimos años.
En ese entorno de ALTODO, Manuel Valero conoció a un joven abogado llamado Eugenio Ribón: “Es uno también de nuestros primeros afiliados a la asociación. Cuando fui presidente en 2009, lo incluí en la junta directiva de la institución, donde hizo un papel muy brillante. Se vio enseguida su capacidad de liderazgo. En aquellos momentos era el hombre de las buenas ideas, muchas de las cuales llevaba a la práctica. Tuvimos mucha relación, de tal forma que compartimos algún encierro en el ICAM para la dignificación del Turno de Oficio. Sin minusvalorar al resto de los decanos que he conocido, es el decano más brillante que he conocido en estos años. Su gestión ha modernizado mucho el ICAM”.

En una etapa concreta el despacho de Manuel Valero en la calle la Palma 34 fue sede de ALTODO. Aquí en una reunión interna (Imagen cedida)
ALTODO, un referente del Turno
Desde su punto de vista, “las fechas claves de la expansión de ALTODO pasan por las campañas de renuncia de asignación de guardias, que se empezaron con el nacimiento de la entidad como tal. Poco a poco se fue integrando más compañeros. Las fechas más importantes son las de 2011 y 2012, porque ahí logramos que el ICAM la oficializara como tal. Junto a ellas, en 2006, Santiago Martín Luengo dio el primer paso para presentarse como diputado al ICAM. Posteriormente, en 2008, hicimos la primera candidatura de ALTODO, en la que salió Hernández-Gil como decano. Y ahí logramos unos 900 votos”.
Sin embargo, otra fecha importante tiene que ver con las elecciones de 2012, donde en la Junta de Gobierno de Sonia Gumpert estuvimos como diputados Begoña Castro, el propio Santiago Luengo y un servidor, con la categoría de vicedecano. El futuro de la asociación corresponde ahora a la junta que preside la nueva presidenta, que es la abogada África Calleja. Nosotros estamos federados dentro de CEAP, de la que es presidente Ángel Llamas, en Alcalá de Henares. Ahora llegamos a ocho o nueve CCAA donde tenemos representación”.
En este futuro más inmediato, se acuerda de Eugenio Ribón, actual decano; Lola Fernández Campillo; y Juan Manuel Mayllo, diputado del Turno en el ICAM, que están plasmando algunas mejoras del Turno de Oficio. “Sin embargo, quedan como asignaturas pendientes unos baremos mejorados y actualizados anualmente y el pago de todas las actuaciones, cuestión que debería venir reflejada en la nueva Ley de Asistencia Jurídica Gratuita que ahora empieza su tramitación parlamentaria. Nuestro futuro pasa por seguir luchando, no podemos dormirnos en los laureles”.
En cuanto al futuro del Turno de Oficio, Valero señala: “Hay que darse cuenta de que es una obligación constitucional, como viene reflejado en el artículo 119 de nuestra Carta Magna. El peligro que tenemos son las bajas que se producen de compañeros porque ven que no se les compensa adecuadamente. Habrá que ver qué soluciones se presentan entre los colegios de abogados y las asociaciones del Turno para resolver este problema. Personalmente, creo que mi paso por el Turno me hizo mejor abogado. La calidad profesional y técnica de nuestros compañeros es muy elevada. Ahora se van a jubilar los de la generación baby boom, veremos quién recoge su testigo”.
