Aprender mientras trabajas: la clave del “mini-debriefing” en despachos jurídicos
Cinco minutos después de cada vista o reunión para capturar lecciones y errores
(Imagen: E&J)
Aprender mientras trabajas: la clave del “mini-debriefing” en despachos jurídicos
Cinco minutos después de cada vista o reunión para capturar lecciones y errores
(Imagen: E&J)
La práctica jurídica es un terreno donde cada encuentro, cada audiencia y cada reunión pueden dejar enseñanzas valiosas, pero también errores que conviene no repetir. En medio del ritmo frenético de los despachos, muchos abogados se centran en cumplir con los plazos y avanzar los expedientes, y olvidan que el aprendizaje continuo ocurre justo después de cada interacción clave. Una estrategia simple y extremadamente eficaz para no desaprovechar estas oportunidades es el mini-debriefing: dedicar cinco minutos inmediatamente después de una vista o reunión importante para capturar lo más relevante que se ha vivido y registrarlo de manera organizada.
La idea central del mini-debriefing es sistematizar la reflexión. Mientras la memoria todavía está fresca, el abogado anota lecciones aprendidas, errores que convendría evitar en el futuro y comentarios o impresiones de jueces, fiscales o clientes. Este registro breve no pretende reemplazar un análisis exhaustivo posterior, sino servir como una cápsula de información inmediata que luego se puede integrar en el expediente o en un acta interna del despacho. La disciplina de detenerse cinco minutos puede parecer mínima, pero su efecto acumulativo a lo largo de semanas y meses es enorme. Permite transformar cada experiencia profesional en una fuente de mejora continua y en una base de conocimiento interno que refuerza la excelencia del equipo.
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