La técnica del “correo de 3 líneas”: cómo comunicar con socios de forma ejecutiva y sin hilos interminables
Tres líneas por email: contexto, decisión y acción. Un formato minimalista que mejora la eficiencia interna y eleva el estándar de comunicación en los despachos
(Imagen: E&J)
La técnica del “correo de 3 líneas”: cómo comunicar con socios de forma ejecutiva y sin hilos interminables
Tres líneas por email: contexto, decisión y acción. Un formato minimalista que mejora la eficiencia interna y eleva el estándar de comunicación en los despachos
(Imagen: E&J)
En la mayoría de los despachos jurídicos, el correo electrónico sigue siendo el canal principal de comunicación interna. Es donde se comparten instrucciones, avances de casos, comentarios de documentos y decisiones que afectan directamente a los clientes. Sin embargo, también es uno de los grandes generadores de ineficiencia. Hilos interminables, respuestas dilatadas, correos con párrafos densos y frases excesivamente formales consumen tiempo y atención que los abogados podrían dedicar a tareas de mayor valor. De ahí surge una práctica cada vez más extendida entre los despachos que buscan modernizar su gestión: la técnica del “correo de 3 líneas”.
El concepto es tan simple como efectivo. Cada correo interno, especialmente cuando va dirigido a un socio o a la dirección del bufete, debe estructurarse en tres líneas: contexto – decisión – acción. Es decir, explicar brevemente qué ocurre, cuál es la cuestión o decisión concreta y qué se propone o se necesita hacer. Un formato que, lejos de limitar, obliga a pensar y priorizar antes de escribir. No se trata de recortar ideas, sino de sintetizarlas hasta su esencia más útil.
Por ejemplo, en lugar de enviar un correo con diez líneas explicando una incidencia procesal, el abogado podría escribir: “Se notificó auto de inadmisión en el recurso de X. La causa es falta de legitimación activa. Propongo interponer reposición antes del viernes.” Tres líneas, claras y accionables. El socio que reciba el mensaje no tiene que leer un párrafo lleno de introducciones o antecedentes; en segundos sabe qué ha pasado, qué significa y qué se sugiere hacer.
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