Premium“El modelo gremial”
"Pues eso, que el gremio que mató a Montesquieu y a la vaina de la separación de poderes, se la desenfunda contra el otro gremio"
(Ilustración: Isabela Roldán/E&J)
“El modelo gremial”
"Pues eso, que el gremio que mató a Montesquieu y a la vaina de la separación de poderes, se la desenfunda contra el otro gremio"
(Ilustración: Isabela Roldán/E&J)
Parte del voraz gremio de los mandatarios, estos son, los genuinos bloqueadores del Poder Judicial, a quienes la ciudadanía desprecia (la líder mejor valorada del actual Ejecutivo obtiene un 4,6 sobre 10) según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), cuyo presidente pertenece al gremio de la socaliña demoscópica y parcialidad institucional, dice estar dispuesto a desatar el enredo en el gobierno de los jueces, siempre y cuando no se tienda hacia “un modelo gremial”.
Ese podría ser el chiste del día, el horóscopo de la contraportada. Pero es que, oyes, la cosa va en serio: consideran que los jueces son un gremio peligroso que requiere de la intervención del dulcísimo y casto gremio de políticos. Que vamos, que la cosa va de gremios y que el mejor de ellos es del que forman parte. Ese gremio donde sus miembros cargan con impresoras para exponer sofisticadas enseñanzas a la ciudadanía; o donde muestran adoquines como alegoría del suceso.
Hay gremios y gremios. La grey del gremio que nos ocupa, sus gregarios militantes, tampoco cree en el sermón de su legítimo pastor -no habrá gremio que a fuer de honesto, mantenga su trono en el reino de los gremios-, pero por una cuestión de prevalencia se siente obligado a domeñar al gremio de la puñeta y la maza.
Pues eso, que el gremio que mató a Montesquieu y a la vaina de la separación de poderes, se la desenfunda contra el otro gremio, por si tienen la ocurrencia de forjar identidad de gremio y gozar de cierta autonomía, vayan a pensarse que son un gremio como el gran gremio, como el gremio del adoquín y la impresora, que es el gremio de los gremios.
Que te vayas enterando, que debemos asumir la «desgremialización» del gremio de los jueces. Y que volvamos todos los segregados a una, a doblar el espinazo, en este sacrificio ritual, ante el gremio de los gremios y ante su divino ministerio.
Estimado Pablo, los gobiernos como el actual en España y en muchos países modernos, tienen tics cada vez más autoritarios, yo creo que ya ni depende del color de los mismos.
Me da que la sociedad occidental, la europea en especial, camina a su autodestrucción, hemos sublimado y como otras civilizaciones seremos defenestrados por las emergentes.
Hemos entrado en una espiral a nivel social y administrativo de un estado que no contento con intervenir la economía, cada vez más interviene nuestras vidas, privándonos una y otra vez de derechos civiles que costó siglos conquistar.
Se pretende que en el centro de la sociedad no esté la persona, el individuo sino el Estado, como ente protector que ante nuestra impericia debe decirnos como vivir, que estudiar y modifica nuestras conductas de forma sospechosamente Orwelliana. Se trata de un tic próximo a un marxismo trasnochado (no creo que el marxismo en sí fuera malo, otra cosa es su plasmación práctica).
Repito, no pretendo hacer tanto una crítica política (los políticos son meros instrumentos), como social. A qué modelo de sociedad nos encaminamos, carente de valores, premiadora de medianías como el Sr. de la impresora y tantos otros.
En fin, día llegará en que no tengamos más derecho que el derecho a cumplir con nuestra obligación