PremiumNace el catedrático y ministro de Administraciones Públicas Sebastián Martín-Retortillo y Baquer
Calle Sebastián Martín-Retortillo y Baquer, en Huesca (Foto: Cadena Ser)
Nace el catedrático y ministro de Administraciones Públicas Sebastián Martín-Retortillo y Baquer
Calle Sebastián Martín-Retortillo y Baquer, en Huesca (Foto: Cadena Ser)
El 7 de febrero de 1931 nació en Huesca el catedrático y ministro de Administraciones Públicas Sebastián Martín-Retortillo y Baquer.
Su padre fue un destacado abogado del Estado e inculcó a Sebastián los principios del Derecho Administrativo. Obtuvo la licenciatura en Derecho en 1953, en la Universidad de Zaragoza con premio extraordinario. Se trasladó a Bolonia, en cuyo Real Colegio de San Clemente de los Españoles se doctoró con la tesis L’ecceso de potere comme vicio degli atti administrativi, que mereció además el premio Víctor Emmanuel II.
Tras ampliar estudios en Múnich y Tubinga y dictar clases en la Universidad Complutense de Madrid y en la de Sevilla, optó a la cátedra de Derecho Administrativo de la Universidad de Santiago de Compostela que ganó en 1962, y después las de Valladolid, la de Barcelona de 1967 a 19745, la Autónoma de Madrid de 1975 a 1983 y finalmente a la que había cursado su carrera, la Complutense de Madrid en 1984. Fue nombrado profesor honorario de la Universidad de San Marcos de Lima, Perú.
Desde 1983 hasta su fallecimiento en 2002, presidió la Asociación Española de Profesores de Derecho Administrativo. Fue miembro de la Academia Aragonesa de Jurisprudencia y Legislación, y de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, así como de la Academia Nacional de Ciencias Sociales de Buenos Aires.
Fue ministro de Administraciones Públicas en uno de los gobiernos de Adolfo Suárez y subsecretario del Ministerio de Educación y Ciencia y secretario de Estado para la Administración Pública.
Entre otros galardones recibió la Gran Cruz de Carlos III, la Gran Cruz de Andrés Bello, y la del Grado de Oficial de la Orden de Mérito de la República Italiana, por haber sus destacadas conferencias en la Universidad de Roma.
El Ayuntamiento de Huesca dedicó su nombre a una de las calles de la mejor zona de la ciudad.
Para saber más: Revista Serrablo. Número 126. Diciembre 2002.
