Acoso laboral, ¿cómo pueden defenderse las empresas?

Luis Pérez Juste, abogado senior de BROSETA. Director del área de Previsión Social

En los tiempos actuales vivimos en entornos laborales complejos donde no siempre resulta sencillo identificar cuando nos encontramos o no ante situaciones de acoso laboral, o lo que es más conocido en nuestra jurisprudencia como “mobbing”.

La compra de compañías, la duplicidad de puestos y el posicionamiento de nuevos equipos directivos dentro de las empresas, entre otros aspectos, pueden generar este tipo de riesgos.

SUMARIO:

El acoso laboral y su diferenciación con la conflictividad laboral
La dificultad probatoria del acoso laboral
Los riesgos psicosociales en el ámbito laboral. Evaluación de riesgos
El despido disciplinario por acoso
Consecuencias del acoso laboral en la esfera del empresario. Responsabilidad solidaria entre el acosador y la empresa

Por este motivo, es esencial diferenciar lo que es realmente una situación de acoso laboral de otro tipo de supuestos de hecho.

El acoso laboral y su diferenciación con la conflictividad laboral

A la hora de analizar las múltiples circunstancias que podrían calificarse de irregulares dentro del seno de una empresa, una de las que más preocupan a las organizaciones son las relacionadas con el acoso entre miembros de su propio personal.

En primer lugar, y antes de profundizar en la cuestión, es imprescindible determinar qué se entiende por acoso laboral.

El acoso laboral viene a ser entendido como aquellos comportamientos dirigidos contra la víctima con la intención de humillar y descalificar a la misma.

Estas conductas pueden consistir tanto en acciones como en omisiones, esto es, conductas consistentes en agresiones físicas, verbales, ataques contra la reputación personal, o eliminación del apoyo que necesita el trabajador para llevar a cabo sus cometidos.

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